S.O.S RUPAC
Nuestro lema siempre debe de ser "DEJAR EL LUGAR MEJOR DE LO QUE LO ENCONTRAMOS" y así fue como estos trekeros que visitaron la ciudadela tuvieron que bajar con la basura personal y la de los viajeros que suponemos la dejaron tirada en el lugar.
Por José Díaz (guía M4.0)
Viernes a las 8.30 en el paradero de Acho, el viaje fue rápido a Huaral, llegando nos dirigimos al terrastation, como siempre la oferta y la demanda, conversar con el chofer y el cierre de contrato, primero La Florida y posteriormente al pueblo fantasma. A las 2 p.m de la tarde llegamos a Florida después de ascender por el camino de herradura que ha cambiado mucho a comparación de los primeros viajes que se hacían en camión u ómnibus. (Pura adrenalina).
Llegando al pueblo pasamos por Cajatambo… S/5.00 morlacos de ingreso y sus respectivos blanquillos(melocotones super deliciosos) para el camino de los aventureros que nos obsequiaron en la tienda.
Llegando al pueblo fantasma a eso de la 3p.m de la tarde , algo cansados del viaje , pues a buscar un lugar para pernoctar esa noche, nos alojamos en el colegio, algunos aventureros que anteriormente se alojaron ahí encendieron una fogata dentro, el techo muestra el daño causado por el fuego.
En la tarde limpiamos algo de la basura de los alrededores y a buscar leña para la noche, la Sra. Santos una de las personas que encontramos en el pueblo, nos comento que estaban por el lugar a fin ubicar a sus vacas y luego buscar forraje para ellas (no hubo lluvia el verano pasado), ¿otra vez el cambio climático?, la Sra. Santos nos regalo un plantón de muña para la sopa y el mate de esa noche.
En la noche armamos la fogata y estuvimos hasta las 10p.m de la noche, asando papas en el carbón, conversando, corriendo desesperados por un cohete que no reventó de un castillo que encontramos de alguna fiesta patronal del mes de Enero y también observando un hermoso cielo abierto lleno de estrellas.
El sábado 7.30 a.m de la mañana iniciamos el ascenso Robert, Janet, Miguel, Liz, Jenny, Francisco y yo, una mañana fresca con la carga encima llevando agua, carpas y todo lo que se puede meter en una mochila; pasamos por la quebrada que mostraba agua a pesar de la época, a eso de las 10 a.m de la mañana nos alcanzo un aventurero de huacho, venia sin cosas y más liviano, él y sus amigos también descansaron en el pueblo fantasma la noche anterior.
A lo largo del camino de ascenso comenzamos a encontrar una serie de botellas abandonadas por todo el trayecto ¿?, cuando llegamos a punto de bienvenida e ingreso a Rupac observamos una cantidad impresionante de botellas de plástico y vidrio, papel, latas de atún todas dejadas por visitantes anteriores, las miradas del grupo decían todo ‘¡¡ç%&&/((()))=•$$”•?=??=))(), ojala sea solo aquí , nos faltaba poco para llegar a las ruinas, nos cruzamos con un grupo de 6 personas que retornaban del pueblo de la Florida.Cuando entramos al espacio para acampar otra vez basura por todos los lados, otra vez $%//(())”••$%%; con la bronca encima armamos las carpas y a realizar la vista a las ruinas, el calor es espectacular en Rupac, las ruinas mantienen ese atractivo impresionante y espectacular y la pregunta de rigor , ¿como lo hicieron?, las columnas invertidas, los pisos, las juntas, los aleros, etc., el nombre del Machupichu de Lima está bien puesto, ojala la Región Lima se ponga las pilas y proteja a Rupac, es calamitoso la situación de los desperdicios dejados en la ciudadela.
Vistamos las ruinas y a protegernos del calor asfixiante, tuvimos la suerte de ver un arco iris en el sol. Hay fotos de este fenómeno.
Observamos con mucha curiosidad que se hacen mesadas en las ruinas y encontramos muchas ofrendas, también rastros de huaqueo; esa tarde en las altura había señales de lluvia, con Franpisco conversábamos llega o no llega, entre broma y broma; nos cogió una pequeña llovizna dos veces esa noche, descansamos con algo de frio no sin antes disfrutar de otra fogata esta vez en Rupac hasta las 11p.m de la noche.
Temprano nos levantamos para observar el amanecer y tomar las últimas fotos, observamos algo de nieve en la quebrada alta de Acos, iniciamos el retorno al pueblo fantasma, dejamos todo los alimentos a las Sra. Santos, ese día había jornada de limpieza de los canales, en el pueblo preguntamos por la manera como hacían el retiro de la basura, nos dijeron que toda la basura la botaban a la quebrada ¿?, nosotros llegamos a Huaral con nuestras bolsas de basura; y antes de embarcarnos hacia Lima , decidimos degustar un delicioso pollito a la brasa, me pareció el mejor pollo que he comido en mucho tiempo, bienvenidos a la Civilización.
