29 de octubre de 2010

LAS LAGUNAS DE HUANCAVELICA Y LA VIZCACHA DORADA


VIVE LA AVENTURA DE 4 TREKEROS

Por Francisco Ramos

"Yo te voy a llevar a un sitio donde las lagunas si son lagunas y no este poquito de agua". Así empieza la invitación que me hicieron llegar la pareja de amigos, Guido Zamora y Ceci Peche, a la legendaria tierra del Mercurio, en Castrovirreyna - Huancavelica, tierra donde viven los padres de Guido en un apacible poblado llamado Totora (un anexo de la Comunidad Campesina de Villa de Arma).
Sábado 8:00 de la mañana paradero Soyuz, rumbo hacia Pisco. Nos despedimos de Lima en medio de una llovizna que hacía más gris la ciudad, chau Lima "La Horrible“, nos vamos a descubrir las hermosas lagunas que tanto nos han contado que miden kilómetros. En Pisco nos esperaba una movilidad para llevarnos a Castrovirreyna, era el hermano de Guido que amablemente nos llevaría en su station wagon todo el trayecto y de paso visitaríamos las ruinas de “Tambo Colorado”, monumento arqueológico de la cultura Inca hecho de barro que están bien conservado, la entrada cuesta 8 soles público en general, muy cara a mi parecer. Luego seguimos el viaje en dirección a la sierra central empleando la carretera Pisco-Ayacucho.En el camino veríamos los cultivos de uva de la zona. Antes de llegar a Huaytará tomamos el desvío a la izquierda (pasando el puente Pacra) y súbitamente se acabó el asfalto, pasamos a una trocha afirmada rumbo a Castrovirreyna, a donde llegaríamos alrededor de las 6:00 de la tarde. Nos quedamos en el hotel municipal que es grande y a un precio cómodo, el cual cuenta con agua caliente y televisor. Al día siguiente iríamos a visitar las inmensas lagunas.Seis de la mañana del día domingo, todos preparados para la caminata, saliendo del pueblo se aprecia la BELLA DURMIENTE una curiosa formación que nos hace percibir entre los cerros la imagen de una mujer recostada mirando el cielo, es tan perfecta esta silueta que se distinguen claramente las formas, me causo asombro por su definición que difícilmente pasa inadvertida convirtiéndose en un atractivo turístico del pueblo de Castrovirreyna. La movilidad nos llevaría hasta la laguna de Pultocc y de ahí empezaríamos el recorrido hasta la laguna Pacococha (donde nos volverían a recoger) pasando por las lagunas Choclococha, Orcococha y San Francisco (pasando además por el pueblo de Santa Inés). Todas las lagunas están ubicadas por encima de los 4,600 m.s.n.m.
Todo indicaba que íbamos a tener un buen día, pero como estábamos en plena época de lluvia preferimos ser precavidos y llevamos ropa impermeable. Yo confiado, y al no conocer esta región (sobre todo el tremendo frio que hace en esta zona) llevé lo mismo que use en mi temporada en Huaraz. Craso error, ya me había advertido Guido: "el frio es intenso sobretodo en esta época en la que las nubes cubren la luz del sol“, además nunca pregunte, ni calcule la distancia que recorreríamos, otro error que casi lamentaríamos.
Las inmensas lagunas que he visto tienen entre 3 y 12 km de extensión siendo la más grande la de Choclococha. Nos encontramos con hermosas vistas con el cielo azul y la variedad de fauna existente en la zona: Vizcachas, huashuas, Parihuanas, si, estas aves en las que se inspiro nuestra Bandera Nacional comen a orillas de estas lagunas, verdaderamente no pensaba que existiera esto en Huancavelica, quede impresionado por sus paisajes que reconfortan el espíritu.
Seguimos caminando y el clima empezó a cambiar, el cielo se cerró y empezó a caer la lluvia. Momento para ponerse los impermeables. El frio, conforme caía la tarde, se hacía más intenso, la neblina hacia ver interesante las lagunas y el viento aumentaba más la sensación del frio, caminábamos sin parar y como dije ese día no entendí o no escuche la distancia que recorreríamos; la realidad era que tendríamos que caminar alrededor de 45 km. Empezamos como a las 9:00 de la mañana y ya eran las 6 de la tarde oscurecía y las piernas ya no daban, el frio y el cansancio hacían estragos, casi congelados seguíamos caminando en medio de la neblina. Guido y Cecilia se adelantan parar ganar tiempo, llegar a la movilidad lo antes posible y así recogernos de inmediato. La noche llega y con la neblina se hacía más oscuro y sinuoso el ambiente, lo único que quedaba era meternos en nuestras bolsa de supervivencia y esperar a que Guido llegara con la movilidad, felizmente no se llego a ese extremo y al final Guido y Cecilia llegaron con la movilidad y nos recogieron sumamente agotados, luego bajaríamos a Castrovirreyna a descansar para el siguiente día.Este día (Lunes) iríamos a visitar a los padres de Guido, otra caminata pero por valles más bajos, llenos de verdor y una geografía maravillosa, un tesoro de esta parte del Perú. Una caminata de 3 horas, tranquilamente, disfrutando de los paisajes y ríos que bajan por los valles. Llegar a la tierra de los padres de Guido lugar donde paso su infancia, me hace pensar en que linda niñez habrá tenido mi amigo en estos bellos lares. Un silbido de Guido cruza el viento anunciando su llegada, su encantadora madre habrá sentido latir su corazón al escuchar que su querido hijo llega al hogar que lo vio crecer y formarse como hombre. Me quedo corto al describir a su linda progenitora, una mujer trabajadora de campo de un carácter tan amable que da gusto disfrutar la compañía y conversar con ella.
Recorrimos su estancia durante la tarde, previo descanso, y luego de una torrencial lluvia Guido nos explicaba como irrigaban los sembríos de alfalfa para el ganado y todos los sembríos que se hacían en las chacras. Mientras tanto, su hermano se iba a cazar Vizcachas al otro lado de la quebrada, "van a probar la carne de esta animalito lo rica que es" nos dijo Guido ,7 vizcachas para los invitados para el desayuno de mañana.
Pasamos la noche en el tibio hogar de la familia de Guido, un lugar tranquilo y apacible aquí chau stress y ruidos molestos de la ciudad! dormimos como muertos hasta el día siguiente. La vizcacha dorada nos esperaba para el desayuno bueno: será una carne más me dije, pero a la primera mordida quede impresionado por el sabor, DELICIOSO no hay otra palabra; realmente "me preocupa que si la gente de Lima prueba esta carne, adiós vizcacha…desaparecería" solo la gente que vive en estos lugares puede darse el lujo y el derecho de comerla.
Bueno, llega la despedida con la esperanza de volver a visitar este lindo lugar, una sensación de tristeza nos queda al alejarnos de este hermoso valle, caminamos de regreso y luego a Castrovirreyna y de ahí volver a Pisco y luego a Lima.
Gracias muchísimas gracias a la señora Constanza por sus atenciones a Guido y Ceci por la invitación a esta hermosa tierra, por compartir y aprender de Uds. a ser generosos, gracias por todo.

"LO VERDADERO ES INVISIBLE A LOS OJOS “